El comentario sobre el artículo una casa sin puertas me parecio coherente en cuanto que enfatiza la necesidad de realizar políticas de estado en todos sus niveles, en este caso distrital. ahora bien, en algún momento de la historia de Punta Alta hubo políticas a largo plazo? si las hubo, diganme cuales? Soy de Coronel Dorrego y no tengo esa informacion
Si por “políticas de estado” entendemos aquellas que trascienden en el tiempo, es decir no son coyunturales y efímeras, se proyectan incluso más allá de las fronteras del distrito, o incluso son compartidas a nivel regional, ya sea porque participan de objetivos o recursos geográficos y económicos –tal el caso de la Zona Franca Cnel. Rosales-Bahía Blanca, y las costas con sus puertos-, o se heredan por tener desarrollos históricos afines, entonces diría que ha habido carencia de una suficiente voluntad político-cultural que haya calado hondo en la conciencia, no sólo de los dirigentes políticos o sociales, sino en la comunidad toda y sus instituciones. En la historia de Cnel. Rosales los partidos políticos han sido vecinalismos administradores de coyunturas, o han estado sujetos a los vaivenes de las políticas del gran vecino o la provincia, y de las grandes cuestiones de la defensa nacional, han sido víctimas o meros espectadores. Se ha declamado mucho sobre políticas de estado, pero han muerto apenas unos metros más allá de las fronteras o la terminal de ómnibus. Y aquí jugó y juega un rol muy importante la cuestión cultural, y ojalá podamos superar cuanto antes ciertas barreras o limitaciones propias de las que hablamos anteriormente. Lo que significa, al fin de cuentas, que no hemos sabido o querido golpear fuerte los poderes políticos-económicos transregionales a la hora de llevar a cabo esas políticas de estado.
Lo escrito acerca de la casa sin puertas,me pareció muy bueno y coincido con el mismo, hace falta politicas dedicadas al desarrollo de la ciudad pero para ello debe haber voluntad politica como hacias referencia.Es verdad que crecimos mirando el desarrollo de nuestra vecina ciudad ,y ya es hora que unamos nuestras propuestas en una sola palabra "progreso",para eso en necesario el compromiso no solo de la dirigencia politica sino tambien de la ciudadania.El cambio debe ser cultural y psicologico,entender que ya no estamos de paso y que este es nuestro sitio que nos pertenece!!
Roxana Noemí ha marcado varios puntos de real trascendencia a la hora de señalar los caminos a seguir para una política real y concreta. Uno es el cambio cultural, si entendemos por cultura todo aquello que signifique modificar las condiciones para la creación de riqueza (entendida como calidad de vida desde un humanismo esencial) y la generación de progreso comunitario. Pero también abordó la toma de conciencia en dos cuestiones, una es entender que no estamos de paso, que ya no estamos de paso, y la otra la importancia del sentido de pertenencia. Ambos conceptos, como fundamento y cimiento de cualquier cambio cultural, serán abordados en una próxima nota, donde cultura, identidad, autonomía, sentido de pertenencia y otros más, serán analizados desde una perpectiva integradora y como basamento de una política municipal globalizadora. Este sitio significará un real espacio de discusión de asuntos sobre el hombre y el destino de los rosaleños. Entendemos que estamos afrontado temas cruciales y de real significación para nuestro futuro.
4 comentarios:
El comentario sobre el artículo una casa sin puertas me parecio coherente en cuanto que enfatiza la necesidad de realizar políticas de estado en todos sus niveles, en este caso distrital.
ahora bien, en algún momento de la historia de Punta Alta hubo políticas a largo plazo? si las hubo, diganme cuales?
Soy de Coronel Dorrego y no tengo esa informacion
Si por “políticas de estado” entendemos aquellas que trascienden en el tiempo, es decir no son coyunturales y efímeras, se proyectan incluso más allá de las fronteras del distrito, o incluso son compartidas a nivel regional, ya sea porque participan de objetivos o recursos geográficos y económicos –tal el caso de la Zona Franca Cnel. Rosales-Bahía Blanca, y las costas con sus puertos-, o se heredan por tener desarrollos históricos afines, entonces diría que ha habido carencia de una suficiente voluntad político-cultural que haya calado hondo en la conciencia, no sólo de los dirigentes políticos o sociales, sino en la comunidad toda y sus instituciones. En la historia de Cnel. Rosales los partidos políticos han sido vecinalismos administradores de coyunturas, o han estado sujetos a los vaivenes de las políticas del gran vecino o la provincia, y de las grandes cuestiones de la defensa nacional, han sido víctimas o meros espectadores. Se ha declamado mucho sobre políticas de estado, pero han muerto apenas unos metros más allá de las fronteras o la terminal de ómnibus. Y aquí jugó y juega un rol muy importante la cuestión cultural, y ojalá podamos superar cuanto antes ciertas barreras o limitaciones propias de las que hablamos anteriormente. Lo que significa, al fin de cuentas, que no hemos sabido o querido golpear fuerte los poderes políticos-económicos transregionales a la hora de llevar a cabo esas políticas de estado.
Lo escrito acerca de la casa sin puertas,me pareció muy bueno y coincido con el mismo, hace falta politicas dedicadas al desarrollo de la ciudad pero para ello debe haber voluntad politica como hacias referencia.Es verdad que crecimos mirando el desarrollo de nuestra vecina ciudad ,y ya es hora que unamos nuestras propuestas en una sola palabra "progreso",para eso en necesario el compromiso no solo de la dirigencia politica sino tambien de la ciudadania.El cambio debe ser cultural y psicologico,entender que ya no estamos de paso y que este es nuestro sitio que nos pertenece!!
Roxana Noemí ha marcado varios puntos de real trascendencia a la hora de señalar los caminos a seguir para una política real y concreta. Uno es el cambio cultural, si entendemos por cultura todo aquello que signifique modificar las condiciones para la creación de riqueza (entendida como calidad de vida desde un humanismo esencial) y la generación de progreso comunitario. Pero también abordó la toma de conciencia en dos cuestiones, una es entender que no estamos de paso, que ya no estamos de paso, y la otra la importancia del sentido de pertenencia. Ambos conceptos, como fundamento y cimiento de cualquier cambio cultural, serán abordados en una próxima nota, donde cultura, identidad, autonomía, sentido de pertenencia y otros más, serán analizados desde una perpectiva integradora y como basamento de una política municipal globalizadora. Este sitio significará un real espacio de discusión de asuntos sobre el hombre y el destino de los rosaleños. Entendemos que estamos afrontado temas cruciales y de real significación para nuestro futuro.
Publicar un comentario